Pueblo Mapuche

Historia
Los mapuches, antes de la conquista española, ocupaban un amplio territorio que abarcaba desde el Valle del Aconcagua, hasta la isla Grande de Chiloé, y desde el Océano Pacifico hasta la Patagonia Argentina.
Los mapuches poseían un territorio muy poblado  estaban organizados socialmente en agrupaciones, situándose principalmente, en los bordes de los ríos.
La presencia Hispánica en territorio mapuche
A su llegada a Chile, los españoles inician un avance hacia el sur el que se ve interrumpido por el encuentro con los mapuches, quienes se enfrentaron rechazando su imposición y la ocupación de su territorio, gracias a su fuerte unidad social y política que mantenían.
El río Bío Bío se transforma en el límite entre ambas culturas, encontrándose el dominio español al Norte. Este encuentro produjo fuertes enfrentamientos que obligaron a los conquistadores a revisar su conducta frente a la Araucanía e intentar una nueva estrategia en sus relaciones con el mapuche, las que apuntaron hacia su evangelización. En 1593 arribaron a la Araucanía los misioneros Jesuitas quienes tienen como objetivo principal difundir el catolicismo por medio de la predicación y la educación, evitando la violencia.

Guerras renombradas
La Guerra de Arauco fue el enfrentamiento que se dio por casi tres siglos entre los Mapuches y los hispano-criollos, y posteriormente con los chilenos. A lo largo de la guerra hubo períodos de mayor y de menos intensidad.
La guerra puede ser dividida en las siguientes etapas:
- Guerra Ofensiva: desde la llegada de los españoles hasta el desastre de Curalaba en 1598.
- Guerra Defensiva: de 1612 a 1626.
- Guerra Ofensiva: de 1626 a 1662
- Sistema de Parlamentos: desde 1654
Durante todo el siglo XVI se dieron una serie de enfrentamientos entre los españoles y los mapuches. Estos terminaron con un alzamiento general de los indígenas al sur del BioBio, conocido como el Desastre de Curalaba. En la batalla murió el gobernador Martín García Oñez de Loyola.
Este desastre marcó el fin de la Conquista. Curalaba también constituía el mayor revés para los españoles en tierra americana, ya que el terreno perdido no volvería a recuperarse, efectivamente, en los doscientos años siguientes.
La guerra defensiva contempló los siguientes aspectos:
- Se mantuvo la línea defensiva en el Biobío, prohibiendo a los militares pasar más allá.
- Se mantuvo el ejército permanente.
- Se estudió un sistema de tributos para los araucanos, que reemplazaría el trabajo en encomiendas.
- Se suspendió la Real Cédula que declaraba esclavos a los aborígenes.
- Se perdonó en nombre del rey a todos los rebeldes.
El padre Valdivia debía organizar la predicación entre los araucanos, pero a pesar de sus esfuerzos y los del gobernador Alonso de Ribera, la guerra defensiva no prosperó. Mapuches y españoles continuaron luchando. Este tipo de guerra existió legalmente hasta el año 1626, cuando Felipe IV autorizó volver a la guerra ofensiva y declaró vigente la Real Cédula de 1608, que hacía esclavos a los rebeldes.
Parlamento de Negrete
Parlamento de Negrete de 1793; de la que emanó un tratado entre las autoridades coloniales españolas de Chile y los principales líderes del pueblo mapuches. La reunión se llevó a afecto del 4 al 7 de marzo de 1793, al borde del Río Biobío, en el vado fronterizo de Negrete, por iniciativa del capitán general y presidente de la Real Audiencia de Chile, entonces llamado Ambrosio O'higgins, Es considerado habitualmente como el más suntuoso, caro y solemne parlamento diplomático realizado en la frontera chilena del Imperio español.
El pueblo se clasificaba en cuatro categorías:
1.    Picunche (pikunche, "gente del norte" de pikun, "norte" y che"persona")
2.    Pegüenches (pewenche: gente del pehuén)
3.    Los lafkenches (lafkenche, "costeño" de Lafken, "mar" y che "persona")
4.    Los huilliches (williche, gente del sur.)
Etapas de la historia mapuche:
8000 A.C hasta 1000 D.C, donde el mapuche desarrolló actividades tempranas de caza y recolección; un segundo periodo va desde 500-1000 D.C al 1500 D.C cuando la economía a alcanzando una base hortícola y probablemente agrícola. Una tercera etapa, desde 1500 D.C al 1700 D.C, se desarrolla una economía mixta con una base hortícola y agrícola. Y finalmente, desde 1700 D.C en adelante, el mapuche desarrolló la agricultura de tala y roce en una economía de subsistencia.
A la llegada del español a la Araucanía encontraron condiciones económicas bien desarrolladas, predominando la agricultura y la ganadería. Esto, llamó la atención sobre todo en las zonas más australes, como en Chiloé. En este territorio, los indígenas vivían en comunidades esparcidas, las que determinaban su organización social y política, definidas por estructuras jerárquicas delimitadas por el control de la tierra, el que se lograba a través de las relaciones de parentesco establecidas por los matrimonios y la poligamia, articulando una estructura organizativa de linajes patrilineales que permiten ampliar nexos políticos entre familiares, linajes y localidades así emparentadas.
En esta estructura el que ostenta el mayor poder dentro de cada comunidad es el Lonko, quién hereditariamente es el que dominaba un territorio y a la población, esta misma estructura se ve más tarde reflejada en sus cementerios. Existiendo de este modo varios Lonkos con sus respetivos núcleos de poder, lo que impedía alcanzar una organización de gobierno centralizado.
De este modo, se fueron desarrollando las relaciones entre el pueblo mapuche a la llegada del español, los que encontraron en este territorio, una sociedad articulada en base a formas de parentesco que le permitía el dominio del territorio y de las redes económicas

Actualmente el pueblo Mapuche continúa reclamando su territorio que fue sometido al dominio de Chile y Argentina a fines del siglo pasado. Ya más dispersos e influenciados por la modernidad de nuestros días, conservan gran parte de sus tradiciones y nombres. Estos últimos usados, en su gran parte, actualmente. Nombres como: Neuquén, Bariloche, Zapala, Chocón, Limay, Pehuajo, Puen, Chos Malal, Lanin,Nahuel Huapi, Lacar, Temuco, Pucón, etc.

También han surgido actividades a nivel internacional en un intento por recuperar parte de la cultura y territorio perdido. Es así como se han llevado a cabo encuentros en varias ciudades europeas y han logrado implementar la educación bilingüe en varias regiones de lo que fuera su territorio
Organización política
Su organización social estaba basada principalmente en la familia y la relación entre ellas, la familia estaba conformada por el padre, su  mujer  y sus hijos. La línea de parentesco más fuerte era la materna. Al no considerarse parientes a los hijos del padre con otras mujeres, no existía el tabú sexual respecto de ellos. Esta creencia, y las conductas que permitía, fueron interpretadas por los españoles como una práctica generalizada de incesto. Actualmente la poligamia tradicional ya no existe entre los mapuche.
Religión y cosmovisión mapuche 
La religión del pueblo mapuche está ligado esencialmente en simbolismo de algunas cosas que conforman un conjunto de creencias y rutinas sagradas, los cuales están presentes en la mayoría de los momentos de la vida cotidiana y del lenguaje de este pueblo, pero todo esto se personifica en la machi quién tiene el poder y respeto de la comunidad por el contacto que tiene con los dioses, los cuales forman parte de una estructura mayor de comprensión del mundo relacionada con el cosmos y la naturaleza, involucrando tanto a los vivos como a los muertos. De esta manera, la cosmovisión mapuche, es la forma utilizada por este pueblo para interpretar la vida y comprender diferentes hechos de la cotidianidad.
“La cosmovisión es el todo. Es la armonía. Es el equilibrio. Es el hombre, naturaleza y lo que ocurre”.
Así, esta forma de comprender el mundo, ha generado a través del tiempo, que este pueblo fuera construyendo un carácter propio en cuanto a la forma de ver y comprender su entorno, traduciéndose en cada aspecto de la vida diaria y por sobre todo en los aspectos ceremoniales.
La cosmovisión está integrada a un contexto cultural y social mucho mayor, reflejando el medio ambiente físico e intelectual, en el cual ha vivido, representado una estructura simbólica dual y simétrica basada en parejas de oposición. Diseñando diferentes concepciones del mundo interrelacionadas entre sí, la primera de ellas tiene que ver con una concepción vertical y jerarquizada del cosmos, por medio de una superposición de siete plataformas cósmicas, las que agrupadas representan al cielo, en la parte superior, la tierra, una instancia intermedia y el infierno, en la parte inferior.
El universo mapuche y su concepción se encuentran sintetizados en el Rehue, el cual es un tronco de un árbol, previamente talado, que representa las plataformas en sus escalones. De este modo el Rehue se constituye en “una figura antropomórfica con escalones, que es plantado frente a la Ruka (Vivienda mapuche) de la Machi, adornado de grandes ramas canelo, laurel, maki y dos pares de coligue con banderas, blancas y celestes”.
“El Rehue, es el puente de conexión del mundo natural con el mundo sobre natural, la Machi al entrar en trance salta sobre él y se eleva, literalmente hacia el mundo del Wenu-Mapu (Tierra de arriba). Los Rehue, en su base están llenos de remedios, plantas, platería, monedas, semillas y alimentos”.
La segunda forma de comprender del mundo, percibe al cosmos de manera horizontal, constituyendo lo más próximo a una plataforma orientada según los cuatro puntos cardinales, reconociéndose cuatro direcciones, de las cuales el Este es el origen, desde donde nace el sol, trayendo consigo el comienzo de la vida. Todas estas expresiones se vislumbran en el trazado del Kultrún, instrumento musical utilizado por la machi. “El Kultrún representa de manera pragmática cómo el Mapuche se imaginó el cosmos, la Tierra, y el sistema solar en su conjunto”.
La tercera concepción implica una interpretación temporal-espacial, vinculada a los movimientos que se realizan en la vida diaria. “Durante las celebración, la comida y la bebida se le pasa a los invitados siguiendo esta lógica circular de los movimientos”.
Similar situación sucede en ceremonias religiosas como el funeral disponiendo de la ubicación del cuerpo del difunto orientado hacia el Este, mientras los hombres giran en círculo espantando los malos espíritus, siguiendo dicha lógica, de Este a Norte, Oeste y finalmente Sur.
Finalmente, la cuarta concepción es la explicación colorista de la vida, plasmada en la vestimenta. Esta concepción llevada a las plataformas se define en las cuatros superiores, el bien, el blanco y azul, la inmediatamente inferior, de transición, el rojo, la terrestre, la presencia de todos estos matices, y la inferior, el mal reflejado por el infierno, el negro. Así, los colores y sus gamas solo están presentes en la plataforma terrestre.
La percepción del color de la naturaleza terrestre y de su bóveda celeste ha establecido una coherente simbología del color entre los mapuche. Por tanto, el color está íntimamente asociado a la visión del cosmos y sus respectivas plataformas.
En la plataforma terrestre existe una unión del cosmos que representan tanto los niveles mágicos-religiosos como empírico-naturales, hecho que ilustra elocuentemente una característica profunda del pensamiento imaginativo mapuche, en el cual confluyen, flexiblemente y sin aparentes contradicciones la fantasía y la realidad, comprendiendo lo sobrenatural proyectado en lo natural, situación que recogen de alguna manera en su emplazamiento los cementerios de diversas comunidades indígenas.
Por otra parte cabe resaltar tras la Independencia de Chile, se acelera un proceso de penetración en la Frontera con el fin de convertir a la población mapuche al catolicismo, promoviendo desde el Estado la necesidad de establecer misiones, las que fueron vistas como un efectivo mecanismo de contacto entre las autoridades civiles y el pueblo mapuche. Asimismo, el gobierno aceleró el asentamiento de estas, solicitándolas en Europa y subsidiando su estadía en estas alejadas tierras. Para tales fines, se situaron entre el río Bío Bío y el Cautín, los Franciscanos, desde la ciudad de Concepción y dependientes del Colegio de Chillán, los que se hacen cargo de la parte norte de la Araucanía.
En tanto, al sur del Cautín, los Capuchinos, mediante 12 sacerdotes venidos desde Europa inician su actividad misional para reforzar a los Franciscanos y sentar las bases del Estado en la Araucanía. Así, se trazó el acercamiento de los mapuches al cristianismo.
Luego empezaron a construir Templos que se ubican cercanos a las plazas de armas, conviviendo el poder religioso adyacente al político, concentrado en potenciar la conversión del mapuche, utilizando como método principal la educación de sus niños. Una prueba de ello es el Templo San Leonardo de Porto Mauricio de la ciudad de Collipulli el que fue emplazado siguiendo esta lógica urbanística y a partir de él nace una escuela destinada para la educación del mapuche.
Las escuelas dieron paso a la paulatina transformación del indígena y la incorporación de signos propios del catolicismo en las prácticas cotidianas de este pueblo. Mientras tanto, los Capuchinos, en esta misma época, emplazan sus misiones de preferencia en sectores rurales donde existían comunidades mapuche, tal es el caso de las ubicadas en Boroa, Cherquenco, Puerto Domínguez y Queule, entre muchas otras. Generando una interacción directa con una vasta población aborigen, produciendo una retroalimentación entre misioneros y mapuche, lo que dio paso a una mayor asimilación de las prácticas cristianas por parte de ellos, lo que se ve reflejado en los cementerios, que nacen al amparo de estos asentamientos religiosos. Un ejemplo de esto es la misión de Boroa, en Nueva Imperial, la que fue desde un comienzo un espacio de convivencia permanente, entre evangelizadores y naturales. Levantando en ella una capilla, escuela, casas para los misioneros, y un cementerio, los que aún se mantienen. En este último, existen tumbas de mapuche con marcada influencia cristiana.
Música
La música tradicional mapuche es principalmente religiosa, como las cantadas en Guillatún,  quienes acompañan al choike con cantos en su danza, aunque también existen composiciones amorosas, de borracheras, canciones acerca de los sucesos de la tierra natal y de personas importantes. Puede ésta estar cantada a modo de monólogo o estar acompañada de algún instrumento musical ceremonial, haciendo de la música en si un cuerpo fusionado, se usan instrumentos de percusión como el cultrún, pero de uso exclusivamente ritual, y las casacahuillas, que son una especie de cascabeles atados a los nudillos. Dos instrumentos característicos son la trutruca, una caña hueca de coligüe con un cuerno en su extremo, y el trompe, que usa la garganta y boca como caja de resonancia. Actualmente se han incorporado otros instrumentos como el acordeón y la trompeta en La Araucanía y la guitarra y el bombo en Los Lagos.

VIVIENDA
La habitación de los mapuches, llamada ruca, en su lengua, era de paja y de barro, de forma redonda con techo cónico o rectangular con techos de dos aguas. El menaje era bien pobre, dormían en pieles y se sentaban en troncos o piedras. En el centro de la vivienda ardía constantemente una fogata.
El fuego se lo procuraban mediante la frotación de dos palos preparados para el objeto. A este primitivo encendedor le llamaron repu. Los mapuches no tenían ciudades; vivían en agrupaciones o reducciones regionales constituidas por varias tribus. Cada tribu estaba formada por familias de una sola estirpe y obedecían a un ulmen o cacique, que generalmente era el más viejo o el más valiente. Solamente en tiempo de guerra reconocían la autoridad suprema de un jefe guerrero.
Machitún
En el machitún se invoca a los antepasados que, en la creencia mapuche, han dejado el mundo terrenal y viven en el mundo espiritual y controlan el arte de diagnosticar males y enfermedades. Ellos velan a las machis y asisten en sus tratamientos. Generalmente se desarrolla dentro de la ruca del enfermo junto con sus parientes.
Al iniciar la ceremonia, la machi sube los siete escalones del rehue. En el ritual, la machi coloca hojas de canelo, el árbol sagrado mapuche y luego las enciende. Con los sonidos del cultrún, ingresa a un estado de trance. Cuando la machi se comunica con sus espíritus, ellos le aclaran la causa de la enfermedad del paciente y los pasos para curarlo, generalmente mediante infusiones específicas para cada enfermedad.

Comida mapuche

Gran parte de su comida era trabajada por ellos mismos, cultivaban la tierra para poder lograr su comida.

-Chicoca: piñón hervido y desecado que se almacena para la temporada invernal.

-Piñón Hervido: se come caliente o frío.

-Muday: piñón pre cocido, triturado y fermentado en su propio jugo.

-Quesos: En su gran mayoría se elaboran con leche de cuerpo firme y sabroso, tienen forma cuadrada y rectangular, suelen pesar entre medio y tres kilogramos. Su fabricación se realiza en los meses de octubre, noviembre diciembre y en época de veraneada.

- Chicha de manzana: Se obtiene de moler y prensar con métodos caseros las manzanas silvestres, que son de tamaño pequeño pero muy jugosas.

-Charqui: Carne salada y desecada que se consume en invierno.

 -Pancutra: Harina hecha masa liviana y cortada en pequeños trozos hervidos en agua, grasa o aceite y sal (tipo sopa).

-Nianchi: Sangre del animal recién carneado puesta en un plato con sal, ají y cilantro en su punto de coagulación.

Características físicas  del pueblo Mapuche
La estatura del Mapuche era baja en promedio 1,61 a 1,63 metros para el hombre y 1,43 a 1,44 para la mujer; de pecho alto, tórax bien desarrollado.
Los senos de la mujer son cónicos, bastante apartados y se proyectan hacia afuera. Las espaldas en ambos sexos son anchas, el cuello corto y grueso y el dorso recto. Los brazos son relativamente cortos y gruesos, sin ser tan musculosos. Los muslos son gruesos y redondos. No se notan las pantorrillas, debido a lo grueso del tobillo. Las manos y los pies son cortos y gruesos.
La cara es generalmente redonda, aun cuando las angulosas son bastante comunes; los pómulos son ligeramente salientes vistos de frente, pero mirada de perfil, la cara es algo aplastada. La nariz es ancha y carnosa, generalmente recta, sentada en su base y nunca aguileña. Los ojos son pequeños y oscuros, raras veces negros y frecuentemente de un pardo algo claro; son horizontales. El pelo es oscuro,  bien negro, grueso y liso, la piel es morena.
Vestuario tradicional mapuche
Los mapuches aborígenes andaban apenas cubiertos con pieles atadas a la cintura. Se amarraban el pelo a la altura de la frente con una tira de cuero o de alguna corteza vegetal, que después hicieron de hilos de colores.  Posteriormente, cuando el traje fue tejido, los hombres comenzaron a usar una manta llamada chamal, muy similar era la vestimenta que usaban las mujeres, un largo chamal, especie de camisa sin mangas, desde los hombros hasta los pies. Más tarde fueron típicos los rebozos y adornos de plata forjada: collares, aros, alfileres, en la mujer, y los vistosos ponchos en el hombre. Siempre anduvieron descalzos.
La vestimenta mapuche ha cambiado mucho a través del tiempo, pero aún es posible observar estas prendas entre los representantes de dicha cultura, especialmente en sus ritos o celebraciones mas ancestrales. Actualmente, se encuentra  más simplificada, sumándole en el caso de las mujeres, amplias polleras de diversos colores y diferentes diseños. En el caso de los hombres, el vestido típico se fue abandonando, reemplazándose por una vestimenta normal de campesino, respetando del tradicional, el poncho tejido y agregándole el sombrero de paño.
El atuendo tradicional de la mujer mapuche se compone de:
Chamal o quetpám o küpam:, que es un gran paño cuadrangular de color negro, que envuelve todo el cuerpo a modo de vestido, dejando al descubierto el hombro izquierdo sujetándolo con un alfiler en el hombro derecho.
El trarihue: faja que se atan a la cintura sobre el quetpám.
La iculla o iquila: que es un gran paño de tejido muy fino, de color negro bordeado por una franja sus bordes de color azul, fucsia o verde. Este se sujeta en los hombros, se prende al cuello y cuelga largo hasta los tobillos y sirve para abrigarse la espalda.
Finalmente el delantal de percala que aunque es de uso bastante más reciente ha tenido gran acogida dentro del vestuario mapuche y ya se le puede considerar tradicional.
külla: es la capa de la mujer, que envuelve a su dueña. Es una prenda esencialmente adulta. Debe ser llevada por las mujeres como tal.
Los quelle: que son sandalias de cuero en forma de plantilla, atadas al pie por correas
Son ellas las que usan y lucen en forma permanente los atuendos tradicionales
La vestimenta masculina
Consistía, hasta el siglo pasado, en una chiripa, que es un trozo de tela que cubría desde la cintura hasta las rodillas en forma de pantalones. Actualmente, los pantalones se complementan con una camisa y tradicionalmente una manta o poncho confeccionada en el telar.
El hombre se viste con un pantalón oscuro, camisa blanca, una manta o makuñ, un sombrero de paño o chumplru, una faja o cinturón hecho de lana o txariwe y unos zapatos llamados sumel y el cintillo tejido en la cabeza o txarllogko.

Trarüchiripa: son soportes corporales. La faja del hombre fue más sencilla en sus figuras. Generalmente era de color rojo, color de los hombres con poder. Cumplía la misma función que la faja femenina.

Makuñ: son las mantas, prendas exclusivamente masculinas. Hay mantas hechas sólo para cubrir y otras sólo para expresar un significado. Toda manta expresa masculinidad, aunque sea kachümakuñ (manta gris, de uso diario), colores de lanas naturales, que van en tonalidades del gris oscuro, pasando por los tonos cafés hasta llegar al blanco. Cumple una función práctica

Si se llenan de colores, es porque sus símbolos se han enriquecido. El negro es un color reservado principalmente para los nobles (ülmen); a diferencia del rojo, que se asocia a  la sangre. Un Kelümakuñ, manta roja, es un "símbolo fuerte".


Adornos
Joyería mapuche
La Joya femenina goza de una gran belleza basada en formas geométricos que logran identificarlas con un estilo único y exclusivo dentro del amplio espectro de joyas antiguas a nivel universal, si bien no cuentan con un trabajo detallista, logran una impresionante estética donde destacan formas cuadradas, trapezoides, circulares, cónicas y redondas, formas antropomorfas y zoomorfas entre otras.
El significado más profundo de las joyas es que son una conexión con el mundo celestial, a través de sus diseños e iconografías como figuras antropomorfas, zoomorfas y símbolos dan cuenta de conceptos relacionados con su cosmovisión, sirven como protección contra los espíritus malignos (pillanes) y conectan con Ngenechen (dios). Existen una serie de símbolos que hacen referencia a la luna y representa a la mujer (fertilidad), la vida, por su parte el sol (antu) representa la fuerza del hombre; el cintillo (trarilonko) es donde se concentra el pensamiento y la lucidez; las joyas pectorales de la mujer hacen referencia a la mujer, su condición de soltera o casada y representan la familia, la descendencia, la ascendencia e invocan a la fecundidad.

Existen joyas que se utilizan dependiendo de ciclo fértil de la tierra (primavera, invierno, verano u otoño) lo que habla en forma explícita de la íntima relación que existe entre el mundo mapuche y la naturaleza. Cada familia goza de joyas que el retafe (orfebre) crea especialmente para cada familia, por lo cual resulta de gran importancia el traspaso de estas joyas que realiza la abuela a su nieta o la madre a su hija.

CLASIFICACION DE LAS JOYAS SEGÚN SU USO

Las Joyas de la indumentaria femenina mapuche pueden ser clasificadas según un tipo de topología y corresponden al uso que se les da dependiendo de la zona del cuerpo donde se us
Prendas de la Cabeza:
Los nombres que recibe cada una de éstas joyas, tienen como pila su denominación de origen, según el idioma propio de esta región; cabeza (lonko) que se dividen en adornos propios de la frente, como los tocados de las trenzas llamados nitrowe, los tocados de la frente; trarilonkos y aros llamados chawai.

Prendas del Cuello:
 Estas se caracterizan por prender de la zona de cuello de las mujeres mapuches; en ésta sección haré mención de un tipo de joya, que no era fabricado del preciado metal de la plata, pero que merece especial anotación debido a su popularidad; es el caso de los meñaques y llankatu, hermosas joyas fabricadas de chacaritas, piedras de río y cuentas de vidrios, que solían prender de los cuellos de las mujeres mapuches. Dentro de la clasificación de las joyas de plata del cuello, que en mapudzungún se denominan akucha (que cuelga), se encuentran: traripel, collares y kilkai

Prendas del Pecho: 
Estas Joyas son las populares dentro de las Joyas Femeninas y se utilizaban pendiendo desde el pecho o de los costados desde los hombros, tales como Trapelakuchas, prendedor de dos y tres cadenas, Sikiles, Runi Runi, Llol-Llol, Etc., Sujetados por decorados y grandes alfileres, conocidos como Tupus Y Punzones.
La orfebrería en plata, que reemplaza a los antiguos adornos en cobre con la llegada de los españoles, pasa a formar parte fundamental en la ornamentación de la mujer mapuche como un importante elemento de prestigio, belleza y status y a través de sus diseños da cuenta de un plano simbólico que refleja la cosmovisión mapuche.
Joyas típicas mapuche

Tupu (alfiler): esta joya es principalmente un objeto funcional, además representa una mágica protección para las mujeres. Existen muchas versiones y cada una representa diferentes íconos del mundo mapuche
Trarilonko (cintillo): existen con monedas de plata, con perlas de plata (y con técnicas mixtas de placas, perlas y monedas, representa el pensamiento y la conexión religioso-mágica entre el hombre y las divinidades celestiales, es una joya muy preciada y popular que se utiliza en las ceremonias.
Kilkai (joya pectoral): está formada por cadenas y pequeños discos, se utilizaba colgando sobre el pecho, sujetada desde los hombros con alfileres (punzón o tupu), y contiene hermosos tallados representados generalmente por aves, semillas, flores y diseños representativos de la naturaleza (el agua, la tierra, etc.)
Chawai (aros): generalmente los aros representan formas relacionadas con la fecundidad y fertilidad,
Vestimenta
El guanaco proporcionaba a los mapuches la lana con la que confeccionaban sus ropas, aunque sus tejidos parecen haber sido de un solo color y sin adornos de figuras. Hombres y mujeres vestían el chamal, especie de camisa larga que se ataba a la cintura. También se cubrían con pieles de zorros, de guanacos y de pumas, y se ornamentaban con collares de plumas y caracoles o de piedrecitas de colores. El uso del poncho es posterior, ya que fue introducido entre los mapuches por los indios peruanos que acompañaban a los españoles.
En la vestimenta mapuche, su grado de elaboración, color y diseño han indican roles y jerarquías dentro de su sociedad. Por ejemplo, el trarihue es una faja exclusiva de las mujeres adultas fértiles y sólo se puede utilizar después de la primera menstruación, a diferencia del pichitrarihue, que es una faja pequeña para niñas impúberes. Éstas son similares pero tienen diferencias de largo, en sus dibujos y colores. El Makuñ. Se dice que, por la sencillez de su estructura textil y sus motivos, constituía la primera prenda que la mujer casada le tejía a su esposo, al iniciar su vida en común.

No hay comentarios:

Publicar un comentario